TORNILLOS REBELDES

¿¿No os ha pasado alguna vez que tenéis que aflojar un tornillo que lleva mucho tiempo puesto, o está algo robinado u oxidado o, aunque no lleve puesto mucho tiempo y esté en perfecto estado, no deja que lo aflojéis??

Pues ahí van un par de posibles soluciones para que en esa batalla salgáis vosotr@s victorios@s. 

Podéis probar echando una pequeña gota de aceite entre el tornillo y la superficie sobre la que está colocado, dejarlo unos minutos y probar con vuestra mejor herramienta. Si el destornillador que usáis no encaja bien, no conseguiréis nada, ha de entrar perfectamente en la ranura de la cabeza para poder hacer suficiente presión.

Otro remedio es poner un poco de una bebida gaseosa, entre las que yo os recomiendo la de la chispa de la vida, ¿¿sabéis no??, la que empieza por "co..." y acaba por "...la", va súper bien, y hacéis lo mismo que antes os he explicado, o sea, dejarlo un momentito y probar a aflojarlo con vuestra fuerza descomunal, pero sin romper nada.   



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Os recomiendo que sigáis visitando este blog, así no os perderéis un montón de buenas ideas y curiosidades.